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¿Cómo tener unas manos perfectas? 5 consejos para cuidarlas adecuadamente
La piel de las manos está sometida a mucho trabajo, pero la recompensa que recibe en forma de atenciones es mínima. Tenemos que poner interés en su cuidado, pues aunque no lo creamos, es nuestra carta de presentación con las personas que no conocemos.
| 05 Junio 2019
El género masculino está mejorando paulatinamente su higiene y estética personal con el paso de los años. Prácticas como la depilación o la peluquería, que hace años muchos hombres ni se planteaban, hoy son perfectamente comunes. Siempre habrá cavernícolas que consideren que incluso echarse colonia no es propio de hombres, pero afortunadamente cada vez son menos los que prodigan la masculinidad del "macho español", en pro de otros conceptos mucho más sanos. Sin embargo, este progreso no ha llegado con la misma intensidad a todas la partes del cuerpo. Las manos son las grandes olvidadas.
Parece que es una zona que pasa desapercibida, pero muchas personas se fijan constantemente en las manos de los demás. Hay cuestiones que, por razones obvias, no podemos cambiar, como puede ser el tamaño de las manos. Suelen resultar más atractivas las manos grandes que las pequeñas. Pero la gran mayoría sí que dependen de nosotros. Por ejemplo, a la hora de estrechar la mano a otra persona, tener la piel áspera es algo que tu interlocutor notará muy rápidamente. Tanto en las relaciones profesionales como en las personales puede resultar en un factor a tener en cuenta, por lo que conviene llevarlas siempre perfectas.
Lavarse las manos periódicamente
Sobra decir algo que se aprende desde el jardín de infancia, pero se puede entender que en algunas ocasiones no nos demos cuenta de que con las manos tocamos cientos de cosas, y otros tantos miles de millones de gérmenes. Por lo que no es una cuestión de limpieza o estética, sino de salud. Las uñas son una zona en la que acostumbra a acumularse suciedad, y ha de tener un cuidado de limpieza específico.
Si tienes la suerte de tener jabón natural casero, perfecto, al ser el que menos daña la piel, pero si no es así, interesa buscar jabones con PH neutro.
Trabajos exigentes con las manos
Hay tareas y trabajos que son muy duros para las manos. Hoy en día, son una minoría porque la mayor parte de la gente trabaja en oficinas, pero aún quedan trabajos muy exigentes físicamente. Tanto si es la naturaleza del trabajo la que fuerza el uso de las manos más de lo debido, como si son los productos químicos que se utilizan en él, es aconsejable el uso de guantes y una especial atención debido a esto, acompañada de la limpieza con productos de olores cítricos.
En el caso de actividades como el levantamiento de pesas en el gimnasio, conviene también el uso de guantes para que no se formen callosidades en la unión de los dedos con la palma de la mano. Si ya las tienes la mejor manera de quitarlas es remojando las manos en agua templada durante un rato para ablandar los callos, y posteriormente eliminarlos con la piedra pómez.
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No morderse las uñas
Es cierto que la mayoría de las personas dejan de morderse las uñas durante la adolescencia, pero en los casos en que este mal hábito se mantiene en el tiempo, es conveniente que se cese de inmediato. Cuantos más años pases mordiendo tus uñas, en peores condiciones crecerán cuando dejes de hacerlo, y más tiempo llevará que vuelvan a ser bonitas.
Corte de uñas adecuado y cuidado de las cutículas
No es demasiado habitual ver hombres recibiendo tratamientos de manicura. Pero que no sea algo usual no significa que no sea aconsejable. Más bien al contrario. Unas uñas bien cuidadas, resistentes y con un corte y lima bien hechos no es fácil de conseguir por tu cuenta, y no es problema apoyarse en la ayuda de profesionales para ello.
A la hora de cortar las uñas es mejor utilizar tijeras que cortauñas, pues es más agresivo y puede crear pequeñas grietas. Igual que la lima, que si es de cristal y se hace la labor completa en la misma dirección, se daña mucho menos la estructura interna de la uña.
Las cutículas son una defensa natural de la uña ante posibles infecciones por lo que no deben ser eliminadas así como así. Se deben hidratar con productos específicos para posteriormente empujarlas ligeramente contra el dedo y que de esta forma se vean menos. Los padrastros de igual forma pueden ser foco de infecciones muy dolorosas y evitarlos se consigue no dejando que la piel de las manos se seque, y fortaleciendo las uñas.
Hidratación
Utilizar crema hidratante sobre las manos y las uñas es una costumbre que debemos adquirir. Da igual la marca. La crema Nivea de bote azul que todos conocemos y tenemos o hemos tenido en algún momento en nuestras casas vale perfectamente para cumplir este desempeño. Pero eso sí, debe aplicarse diariamente para que la piel no se reseque y quede áspera.
Lavarse las manos en exceso o tenerlas en contacto directo con el agua (por ejemplo, fregando) también puede resecarlas más de lo debido y acabar por ser perjudicial. Por ello se aconseja el uso de guantes para este tipo de tareas.