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9 consejos que debes seguir para potenciar al máximo tu perfume
Muchos de nosotros no conocemos las propiedades de las fragancias que nos ponemos día a día, ni sabemos potenciar su olor ni alargar la duración de todo lo que nos hemos echado. Te contamos 9 sencillos trucos para sacar el máximo partido a esta colonia que tienes en casa y no malgastarla.
| 26 Septiembre 2018
La colonia es uno de los complementos que más cuidamos, un elemento básico en nuestro día a día que puede decir mucho de nosotros. Por tanto, es necesario dotarle de la importancia que merece, y hacerse con uno que realmente se adapte a lo que queremos, pues existen tantos tipos de perfumes como olores te puedas imaginar.
Uno de los aspectos a los que más atención ponemos a la hora de comprar un perfume es su fragancia y el tiempo que dura. Es muy probable que alguna vez te hayas parado a pensar que el olor de tu colonia se esfuma muy rápido y no sepas por qué. Aunque nuestro olfato se acostumbra a la colonia y dejamos de olerla, seguramente estés haciendo algo más a la hora de echártela por el cuerpo. Por ello deberías prestar mucha atención, ya que este codiciado líquido lleva unas reglas no escritas que deben ser conocidas, y que en MENzig vamos a enumerar. Has elegido el artículo indicado.
1 Échate el perfume justo después de la ducha
Siempre tendemos a rociarnos nuestro perfume favorito una vez estamos ya listos, prácticamente con el abrigo puesto, pero lo cierto es que la situación ideal para sacarle algo más de provecho a nuestra fragancia es nada más ducharnos, ya que los poros de la piel, cuando utilizas agua caliente, se encuentran más abiertos y por consiguiente absorben mejor la fragancia. Además, una piel húmeda e hidratada potencia aún más el olor.
2 Nunca te pongas el perfume si tu piel está mojada
Hablábamos de que el mejor momento para echarse la colonia es tras la ducha. Pero claro, siempre que ya estés seco, si no no valdrá para nada, terminará por no adherirse a la piel y perderás gran parte del efecto de la pulverización. Recuerda también secarte las zonas más difíciles como la parte posterior de las rodillas, las axilas, la clavículas, el cuello o la parte de detrás de las orejas, punto denominados como "de pulso" donde el efecto potenciador es el doble.
3 Hidrata tu piel siempre que puedas
Uno de los puntos a los que debes prestar más atención es al cuidado de tu piel, ya que si eres de esas personas con un cutis reseco el efecto será menor. Es por ello que te recomendamos que, una vez te hayas secado, utilices un gel hidratante con el que conseguir una mejor absorción de la colonia. Así mismo, hay que elegir correctamente la loción corporal o el gel, puesto que uno con un olor muy potente podría tapar o mezclarse con la fragancia de la colonia, con un resultado poco agradable.
4 Pulverízate la fragancia en "los puntos del pulso"
Como hemos apuntado antes, no todos los sitios de nuestro cuerpo son los más indicados para que el olor se mantenga. Lo primero de todo, si eres de los que te echas la colonia por toda la ropa olvídalo cuanto antes, ya que no funciona e incluso podría dejarte manchas dependiendo del tipo. Para evitarlo, deberías saber que en nuestro cuerpo existen diferentes zonas donde el calor se concentra por la cercanía de la piel a los vasos sanguíneos: la zona de la muñeca, el área del cuello, la parte interior de los codos y de las rodillas, la parte de atrás de las orejas e incluso el ombligo. Prueba a echarte la colonia en estas zonas y verás como el olor se mantiene mucho mas tiempo.
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5 Échate la colonia alejada de tu cuerpo y no abuses de ella
Para una correcta administración del perfume deberías conocer que no hace falta que cojas el bote y te lo pongas pegado al cuerpo. Con una distancia de entre 15 y 18 centímetros será suficiente para que la fragancia te envuelva. De esta forma, tampoco es necesario que te rocíes en abundancia dado que dos o tres pulverizaciones serán suficientes para oler bien. Recuerda que, aunque tú no te huelas a ti mismo, los demás sí lo hacen. Y no es plan de que pierdan el sentido del olfato a tu lado.
6 Aplica el perfume dando golpes suaves y déjala secar
Una vez que decidas en qué puntos de pulso vas a aplicarte la fragancia, la siguiente preocupación tiene que ver con el bote. Muchos de ellos no cuentan con el rociador y por lo tanto tendrás que utilizar tus manos. Para estos casos lo más recomendable es que te apliques varias gotas directamente en la zona y posteriormente te frotes suavemente con la yema de los dedos realizando movimientos circulares. Cuando hayas terminado, déjalo secar. Si tienes un perfume con pulverizador tan solo limítate a esperar a que se seque durante un par de minutos.
7 Aplícate el perfume cada pocas horas
Al igual que puede ocurrir con otros artículos como las cremas solares, la colonia es otro producto que debe reponerse cada cierto tiempo al irse perdiendo sus propiedades. Aunque no existe un horario establecido, ya que dependerá mucho de lo que estemos haciendo, en general lo más recomendable es que te repongas la fragancia dos veces al día. No te obsesiones con esta ley no escrita y empieces a abusar mucho del perfume, porque no es lo mismo estar todo el día en un lugar como una oficina que por la calle o en un sitio donde haya una gran cantidad de olores que puedan impregnarse en la ropa, como puede ser una discoteca.
8 Mira la fecha de caducidad del perfume
Sí, los perfumes también tienen una fecha en la que pueden perder progresivamente su olor característico. A pesar de que parezca que el frasco se conserva como el primer día, estás muy equivocado. De hecho, lo más seguro es que ya ni huela, así que gástalo en un tiempo decente. Si quieres prolongar su vida, lo fundamental es mantener el perfume alejado de los rayos solares y del calor para evitar que se estropee.
El último consejo: ten dos colonias diferentes
Todos contamos con una colonia favorita que nos tiene conquistados. Pero los monopolios nunca son buenos, tampoco en los perfumes. Lo mejor es reservarse esa colonia especial para las situaciones especiales, y otra más corriente (o no) para el día a día. O incluso puedes elegir un estilo en función del momento en el que te encuentres: una más dulce por las mañanas, una más ácida por la tarde y la que más te guste para la noche. Con esta combinación, triunfar en la vida será un poquito más fácil.