Chanel
El collar de perlas ya no es exclusivo para mujeres: cada vez más hombres lo incorporan a su outfit
Cada vez son más las prendas y complementos que no tienen género. Los últimos en unirse a este grupo, o al menos en intentarlo, son los collares de perlas, que ya se han podido ver en el cuello de numerosos famosos.
| 05 Febrero 2020
En los años 20 del siglo pasado, Coco Chanel puso de moda los collares de perlas. Durante toda la historia esta gema ha sido una especie de fetiche para diferentes culturas, pero fue la diseñadora francesa quien la introdujo en el imaginario de la moda occidental. Y decimos en el imaginario y no en los tocadores porque no todo el mundo podía llevar las perlas, ya que pronto se le atribuyó una connotación de distinción y de lujo. Pocos años después de esto, se empezaron a aceptar como verdaderas las perlas cultivadas que a finales del siglo XIX Korichi Mikimoto había inventado, y que sirvió para popularizar esta joya entre mujeres que no eran de la alta sociedad.
Como vemos, las perlas se han reinventado y todavía hoy lo hacen, característica inherente a casi todas las cosas que pretendan tener cierta longevidad. La última vuelta de tuerca (o de perla) es que los colgantes de esta joya están empezando a verse en los cuellos de algunos hombres siguiendo una tendencia de estos tiempos en los que hay cierta voluntad en acabar con los roles de género y los estereotipos. Esto afecta a nuestro aspecto y armarios y tocadores, en los que cada vez podemos encontrar más elementos que hasta hace nada eran entendidos como de mujeres.
Uno de los primeros fue uno de los primeros en ser vistos con esta alhaja con motivo de su colaboración con Chanel a principios de 2019 fue el rapero Pharrell Williams. Y debieron gustarle los collares al autor de Happy porque desde entonces ha continuado utilizándolos casi tanto como su famoso gorro.
También otros músicos, internacionales y nacionales, han llevado el colgante de perlas en algún momento: ejemplo de los primeros es Travis Scott, y de los segundos C. Tangana o Kaydy Cain. No parece casualidad que esta nueva tendencia haya llegado con fuerza al hip-hop, un mundo en el que las joyas son un elemento tan importante como las propias canciones, por lo que los cuellos de los raperos ya venían preparados. De hecho, lo cierto es que en este caso las perlas pasan bastante desapercibidas, pese a que su presencia es novedosa por haber sido un complemento tradicionalmente reservado para mujeres.
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Fuera del rap, pero sin salir del mundo de la música, destaca Harry Styles, convertido en un auténtico referente de la moda de nuestros tiempos con colaboraciones con Gucci, que le ha convertido en una de sus imágenes habituales. El exmiembro de One Direction es bastante conocido por arriesgar en sus looks, así que el incorporar un collar (por muy de perlas que sea) ha debido ser pan comido para él.
Y si hablamos de arriesgar, no podemos dejarnos fuera a Marc Jacobs, que va siempre a la vanguardia a la hora de resignificar prendas y complementos. Al diseñador neoyorkino le hemos podido ver con las uñas pintadas, maquillado, con tacones... Y también con las perlas. Todo esto se lo podríamos aplicar también a Pelayo Díaz, otro hombre que se atreve con todo y que en ocasiones ha incorporado a su cuello estos colgantes de perlas. En los casos de Jacobs y de Pelayo sucede lo contrario de lo que hemos comentado con Travis Scott y el resto de raperos: el collar destaca mucho más. De hecho, con esta nueva tendencia se han cumplido los pasos más habituales sobre cualquier moda que surge: los especialistas en moda lo lanzan, los famosos le dan visibilidad y el resto del mundo los copia. Falta el tercer paso: ¿lo veremos próximamente?
De momento, este fenómeno parece reservado a las figuras públicas e influencers, sin haberlo podido apreciar esta joya en los cuellos de casi ningún hombre anónimo. Sin embargo, no lo descartamos en el futuro, ya que hasta hace no mucho tiempo tampoco eran habituales los pendientes, y ahora casi nadie se atrevería a contradecir que son tan propios de los hombres como de las mujeres.